

Ellos no merecen descender. Porque están siempre. Porque le ponen la garra imprescindible en los momentos menos gratos. Por ellos Misura este domingo debería quedarse en la A. Y en ellos deberíamos mirarnos todos. Aportar, estar, insistir, llegar temprano, apoyar al de al lado, arengar, generar esa mística que en algún tiempo era un rasgo central y, quizá, la matriz de ciertos éxitos. Ellos saben de qué se trata. Espero que todos los demás estemos este fin de semana a la altura de las circunstancias.